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Los ojos de los niños deben estar protegidos del sol para evitar que se produzca un daño permanente en la vista.

Nuestros ojos son diez veces más sensibles a la luz ultravioleta (UV) que nuestra piel y los ojos de los niños corren mayor riesgo de ser dañados, por la cantidad de horas que están expuestos a la luz del sol. Las pupilas de los niños son más grandes y están expuestas a que hasta un 70% más de la luz UV llegue a su retina en comparación con el ojo de un adulto.

Las últimas cifras de la Organización Mundial de la Salud estiman que la falta de protección ocular natural combinada con la cantidad de tiempo que los niños pasan jugando al aire libre puede suponer que hasta el 80% de los rayos UV de toda la vida sean absorbidos antes de los 18 años.

La exposición acumulada a los rayos UV es uno de los principales factores de riesgo de la degeneración macular relacionada con la edad: como son la pérdida de visión y las cataratas que afectan a una de cada tres personas mayores de 65 años. Comenzar a utilizar gafas de sol en una edad temprana puede ayudar a prevenir estas afecciones oculares.

Por lo tanto, al igual que la crema solar y las gorras, recomendamos que los niños empiecen a usar gafas de sol tan pronto como puedan llevarlas.

Ten cuidado con las gafas de sol baratas o divertidas que realmente pueden hacer mucho daño al ojo, ya que si se coloca una lente sin la protección necesaria en el ojo de un niño su pupila se hará más grande y permitirá un mayor paso de luz dañina al interior del ojo.

En COR disponemos de gafas de sol para niños que se adaptan a bebés y niños a partir de 1 año. Los marcos y lentes son resistentes a los impactos, ligeros y tienen 100% de protección contra rayos UVA y UVB. La anatomía de los más pequeños es diferente a la de los adultos y es por eso que requiere una atención especial, en ciertos casos utilizamos incluso una correa elástica de neopreno para mantener las gafas en su lugar que permite flexibilidad y comodidad. ¡Disponemos de una variedad de colores y diseños tan geniales que los niños no querrán quitárselas!